Buenas señales:
- Pudiste responder las preguntas fácilmente y con los detalles apropiados.
- Entendiste por qué se hacían las preguntas.
- Pudiste hacer tus propias preguntas relevantes para la discusión, y lo hiciste sin pensar demasiado o pedirles específicamente que impresionen al entrevistador.
- La conversación fluyó bien, y se sintió lógica y fácil.
- Las señales no verbales, como el lenguaje corporal y el tono y el medidor del discurso del entrevistador, le dijeron que se sentían cómodos con usted y que lo que estaba diciendo era interesante. Asintiendo, sonriendo, preguntas de seguimiento, afecto amistoso, etc.
- Sentía que tenía un buen sentido del trabajo y los tipos de trabajo técnico que estaría haciendo al final de la discusión.
- Si se le pidió que demostrara o proporcionara ejemplos de su trabajo, se sintió cómodo tanto con lo que demostró / mostró como con la conversación posterior al respecto.
- Cuando se cerró la entrevista, el entrevistador le proporcionó información sobre los “próximos pasos” y parecía realmente interesado en usted.
- Saliste sintiéndote seguro y a gusto, y sentiste que te conectabas bien con los entrevistadores.